La
vida es bella es una película con un mensaje positivo y de superación ante la
adversidad. Nos habla de la esperanza como un estado del ánimo, favorable, que
nos permite resolver nuestros problemas con la convicción de que lo haremos
bien, independientemente de que el resultado querido se concrete o no.
La
esperanza da sentido a la vida y es un detonante para ponernos en marcha y
enviarnos a trabajar con fuerza detrás de un ideal. En la práctica trabajamos,
nos movemos y actuamos porque tenemos la esperanza de llegar a alguna parte, de
lograr un objetivo, de alcanzar una meta o hacer realidad un sueño.
La
película muestra a Guido como un hombre soñador en la Italia que quiere tener
una tienda de libros; ve la vida con optimismo y esperanza. Se enamora de Dora,
forma una familia y tienen un hijo que protegerá con fantasía, creatividad y
humor del horror de la guerra y sus consecuencias. En medio del totalitarismo
nazi, no se desmorona y hace de la guerra un juego entre su hijo y él para que
no le marque la horrible masacre que se realizó con el pueblo judío.
La
vida es bella es una película con un gran mensaje de reflexión que muestra la
visión positiva que su protagonista Guido siempre tuvo con los problemas de su vida
y transmitió a su hijo Josue a pesar de las trágicas situaciones que se vivían
durante la época nazi. Esta película se presenta como un drama o tragicomedia
que nos enseña a ver los detalles más hermosos de la vida sin importar cual
duro sea el que camino que hay por recorrer, siempre se muestra la luz de la
esperanza y fe que proyecta Guido a su familia haciéndoles ver de una forma
graciosa que para todo problema hay una solución. Guido vive en una Italia que
es pre fascista y su carácter es el de una buena persona, es muy humilde e
inocente con un pequeño sueño: tener algún día su propia tienda de libros. Un
día cuando se divertía con su amigo Ferruccio
conoce a Dora, una hermosa mujer que es maestra de quien se enamora perdidamente.
Desafortunadamente, Dora, a quien Guio llama Princesa, está comprometida y lo
peor de todo, su novio es un oficial fascista con el que Guido ha tenido un
gran problema. No obstante, Guido no se da por vencido y se seduce a Dora. Tras
hacer todo lo posible por conseguir su amor se casan, tienen un hijo y planean
obtener la tienda de libros. Pero por cada acción hay una reacción y los
problemas comienzan a aparecer muy pronto y Guido es quien tiene que afrontar
la discriminación y mal trato que se otorgaba a los judíos en la época nazi, a
causa de esto y su decencia judía toda su familia es llevada a un campo de
concentración donde sufren por separado, la crueldad de la guerra. La
determinación de Guido se convierte en una cuestión de vida o muerte cuando quiere
escapar con toda su familia. Ahora, en ese mundo inimaginable,
“SI QUIERES VER EL
ARCOIRIS TIENES QUE SOPORTAR LA LLUVIA “
“LA FELICIDAD NO ES UNA
SITUACIÓ, ES UNA DECISIÓN"
La
intervención en crisis se remonta a los trabajos de Eric Lindemann y
colaboradores para atender a los familiares de los 493 muertos del incendio en
el centro nocturno Coconut Grove en Boston en 1942, afirmando que a través de
una investigación de la historia de pacientes psiquiátricos, durante ciertos
periodos de crisis, el individuo parece enfrentar sus problemas de una manera
inadaptada en la cual surge un deterioro en la salud. El encuentro surge como
iniciativa de Psicólogos Emergencistas de México (PSIEMEX) y el Equipo de
Respuesta Inmediata de Apoyo Psicológico en Emergencias y Desastres (ERIAPSIC)
para fomentar resiliencia y conductas sanas de afrontamiento en la sociedad
ante emergencias por desastres naturales, situaciones de violencia, accidentes,
enfermedades y otras eventualidades emocionalmente perturbadoras, reconociendo
la prevención en la salud mental y social como un eje de acción indispensable.
Existen una multitud de significados atribuidos al término humanitario.
En el contexto de la ayuda humanitaria se trata
de salvar vidas y aliviar el sufrimiento. Típicamente se relaciona con la respuesta de
emergencia (también reconocido como la respuesta humanitaria), en
caso de un desastre o antrópico incluyendo una guerra u otro conflicto armado. Principios
humanitarios gobiernan a la manera en que se lleva a cabo una respuesta
humanitaria.
La Resolución 46/182 de la Asamblea General[] se anota los tres principios
de la neutralidad, humanidad e imparcialidad en su anexo como un guía para proveer la asistencia
humanitaria. La Resolución fue diseñada a fortalecer la respuesta
humanitaria del Sistema Naciones Unidas, y aplica claramente a las Agencias de
las Naciones Unidas. Posteriormente se incorpora el principio de la Independencia operacional.
PRINCIPIOS FUNDAMENTALES
HUMANIDAD El principio de humanidad
quiere decir que el ser humano debe ser tratado humanamente en toda
circunstancia a través de la protección de vidas y aliviando el sufrimiento, al
mismo tiempo que se asegura el respeto del individuo. Este es el principio
fundamental de la respuesta humanitaria.[]
IMPARCIALIDAD
La provisión de la asistencia
humanitaria debe ser imparcial y no basada en la nacionalidad, la raza, la
religión o el punto de vista político. Debe basarse en la necesidad
exclusivamente.
Para la mayor parte de las ONG humanitarias, el principio de
imparcialidad no es ambiguo incluso aunque sea difícil de aplicar en ocasiones,
especialmente en situaciones rápidamente cambiantes. No obstante, ya no es
evidente qué organizaciones pueden considerarse humanitarias. Por ejemplo,
empresas como PADCO, subcontratista de USAID, en algunos casos se
ven como ONG humanitaria. Pero para las agencias de Naciones Unidas,
particularmente en casos donde la ONU está involucrada en operaciones de paz en
virtud del mandato de una resolución del Consejo de Seguridad, no queda claro si la
ONU actúa de una manera imparcial cuando una de las partes actúa violando la Carta de las Naciones Unidas.[]
NEUTRALIDAD
El CICR sigue, además de los
principios centrales, el principio de la neutralidad. Para la Cruz Roja, la
neutralidad significa no tomar lados en las hostilidades o involucrarse en
ningún momento en controversias de una naturaleza política, racial, religiosa o
ideológica.
El principio de la neutralidad
fue específicamente anotada en el Movimiento de la Cruz Roja
no solamente para prevenirlo de tomar lados en un conflicto, si no para evitar
"involucrarse en cualquier momento en controversias de una naturaleza
política, racial, religiosa o ideológica." El principio de la Neutralidad
fue dejada por fuera del Código de la Cruz Roja/ONG dado que unos actores humanitarios,
mientras que se comprometen con entregar asistencia imparcial, no estaban
preparados a dejar de hacer cabildeo sobre temas de justicia relacionadas a
cuestiones políticas y ideológicas.
La neutralidad también puede
ser aplicada a las acciones humanitarias de un Estado. "La neutralidad se
mantiene estrechamente ligada a la definición cual introdujo el concepto en el
derecho internacional de designar el estatus de un Estado cual decidió
mantenerse apartado de un conflicto
armado. Por ende, sus aplicaciones debajo del derecho positivo
siguen dependiendo en los criterios de abstención e imparcialidad cuales han
caracterizado la neutralidad desde un inicio."[]
La aplicación de la palabra neutralidad
a la ayuda humanitaria distribuida por las Agencias
del SNU o incluso por gobierno puede ser confusa. Resolución 46/182 proclama
el principio de la neutralidad, aunque como una organización política
inter-gubernamental, la ONU frecuentemente está involucrada en controversias de
una naturaleza política. Según esta interpretación, una Agencia ONU o un
gobierno puede proveer una ayuda humanitaria neutral tal con tal que lo hace imparcialmente,
basándose únicamente en la necesidad.[]
Hoy en día, la palabra
neutralidad está ampliamente utilizada entre la comunidad humanitaria,
usualmente para significar la provisión de la ayuda humanitaria de una manera
imparcial e independiente, basada únicamente en la necesidad. Pocas ONG internacionales
han reducido su trabajo a favor de la justicia o en temas de derechos humanos
por su compromiso con la neutralidad.
CÓDIGO DE CONDUCTA DE LA CRUZ ROJA/ONG
IMPERATIVA HUMANITARIA
El Código de
conducta relativo al socorro en casos de desastre para el Movimiento
Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja y las Organizaciones No
Gubernamentales (ONG) introduce al concepto de la imperativa
humanitaria cual expande el principio de la humanidad para incluir el derecho
de recibir y dar ayuda humanitaria. Anuncia a la obligación de
la comunidad internacional "proveer la asistencia humanitaria en dónde se
necesite."[]
PRINCIPIOS HUMANITARIOS ADICIONALES
Además de los principios
centrales, también existen otros principios que gobiernan a la respuesta
humanitaria para tipos específicos de actores humanitarios tales
como Agencias SNU, miembros del Movimiento de la Cruz Roja y las ONG.
INDEPENDENCIA
Los actores humanitarios deben
formular e implementar sus propias políticas independientemente de las
políticas o acciones de gobiernos.
Problemas pueden surgir dado
que la mayoría de actores humanitarios dependen en diferentes grados de
donantes gubernamentales. Por este motivo, para algunas organizaciones es
difícil mantener su independencia de los donantes y no se debe confundirlos en
el terreno con los gobiernos que pueden ser involucrados en las hostilidades.
El CICR
ha creado el ejemplo para mantener a su independencia (y neutralidad)
solicitando sus fondos de gobiernos a través del uso de llamamientos separados
para su sede y sus operaciones en el terreno.[]
PRINCIPIOS CENTRALES
Los principios centrales son
las características definitivas, las condiciones necesarias para la respuesta humanitaria. Las
organizaciones
tales como las fuerzas militares y las
corporaciones pueden enviar asistencia a las comunidades afectadas por el
desastre para poder salvar vidas y aliviar el sufrimiento, pero no son
considerados ser parte del sector humanitario como actores humanitarios dado
que su respuesta no está basada en los principios centrales.
PROSELITISMO
La provisión de la ayuda no
debe explotar a la vulnerabilidad de las víctimas
y ser utilizado para avanzar a credos políticos o religiosos. Todos los actores
humanitarios cuando firman el Código de Conducta CR/ONG, se han comprometido a
no utilizar a la respuesta humanitaria para avanzar credos políticos o
religiosos.
PRINCIPIOS BASADOS EN EXPERIENCIA DE CAMPO EN EMERGENCIAS
Todos estos principios
alistados son requisitos importantes para operaciones de campo efectivos. Están
basados sobre experiencia amplia de campo por parte de los actores humanitarios. En
situaciones deconflicto, su brecha puede afectar drásticamente la capacidad
de los actores de responder a las necesidades de las
víctimas.
Si una parte en el conflicto
cree, por ejemplo, que un actor está favoreciendo al lado contrario, o que es
un agente del enemigo, acceso humanitario a las
víctimas puede ser bloqueada y las vidas de los trabajadores humanitarios
pueden ponerse en peligro. Si una de las partes percibe que un actor está
tratando de avanzar un credo religioso diferente, puede causar una reacción hostil
por razón de sus actividades.
PRINCIPIOS ADICIONALES
El Código de
Conducta CR/ONG también tiene una lista de varios principios
adicionales de aspiración cuales se derivan de la experiencia con ayuda humanitaria.
Agencias
deben operar respectando culturas y costumbres locales
La
respuesta humanitaria debe utilizar recursos y capacidades locales en lo
posible
La respuesta
de emergencia debe buscar en reducir vulnerabilidades en el
futuro
La
participación de los beneficiarios debe ser fomentada
Las
agencias deben responder tanto a donantes como a beneficiarios
Actores
humanitarios deben utilizar sus actividades de publicidad para
representar a las víctimas como seres humanos con dignidad, no sin esperanza.
EL DERECHO A UNA VIDA CON DIGNIDAD
La Carta
Humanitaria del Proyecto Esfera utiliza a un lenguaje de derechos humanos para recordar que el derecho a la vida cual
está proclamada en la Declaración
Universal de Derechos Humanos y la Convención Internacional de Derechos Civiles y Políticos se
relaciona con la dignidad humana.
CÓDIGO DE CONDUCTA RELATIVO
AL SOCORRO
EN CASOS DE DESASTRE
Código de conducta relativo
al socorro en casos de desastre para el
Movimiento Internacional de
la Cruz Roja y de la Media Luna Roja y las
Organizaciones No
Gubernamentales (ONG)
XXVI Conferencia
Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, 1995
PROPÓSITO
El propósito del
presente Código de Conducta es preservar nuestras normas de comportamiento. No
se tratan en él detalles de las operaciones, como por ejemplo la forma de
calcular las raciones alimentarias o de establecer un campamento de refugiados.
Su propósito es más bien mantener los elevados niveles de independencia,
eficacia y resultados que procuran alcanzar las organizaciones no
gubernamentales (ONG) y el Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la
Media Luna Roja en sus intervenciones a raíz de catástrofes. Se trata de un
código de carácter voluntario que respetarán todas las organizaciones no
gubernamentales que lo suscriban, movidas por el deseo de mantener las normas
en él establecidas.
El código propiamente
dicho figura en la primera sección. En los anexos siguientes se describe el
entorno de trabajo que cabe desear propicien los Gobiernos, tanto de los países
beneficiarios como de los países donantes, y las organizaciones
intergubernamentales a fin de facilitar la eficaz prestación de asistencia
humanitaria.
DEFINICIONES
ONG:las siglas ONG (organizaciones no
gubernamentales) se refieren aquí a todas las organizaciones, tanto nacionales
corno internacionales, constituidas separadamente del gobierno del país en el
que han sido fundadas.
ONGH: las siglas ONGH se han acuñado, a los fines del presente documento, para
designar a las organizaciones no gubernamentales de carácter humanitario que
engloban a los componentes del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la
Media Luna Roja –esto es, el Comité Internacional de la Cruz Roja, la
Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja
y sus Sociedades Nacionales miembros- junto con las organizaciones no
gubernamentales conforme se las define anteriormente. Este Código se refiere en
particular a las organizaciones no gubernamentales de carácter humanitario que se
ocupan de la prestación de asistencia motivada por catástrofes.
OIG:las
siglas OIG (organizaciones intergubernamentales) designan a las organizaciones constituidas
por dos o más gobiernos. Engloban pues, todas las organizaciones del sistema de
las Naciones Unidas y las organizaciones zonales.
DESASTRES:los
desastres se definen como acontecimientos extremos y aciagos que se cobran
vidas humanas y provocan tanto gran sufrimiento y angustia como vasto perjuiciomaterial.
CÓDIGO DE CONDUCTA:normas de conducta para el Movimiento
Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja y las organizaciones no
gubernamentales en programas motivados por catástrofes.
1.LO
PRIMERO ES EL DEBER HUMANITARIO
El derecho a recibir y a
brindar asistencia humanitaria constituye un principio humanitario fundamental
que asiste a todo ciudadano en todo país. En calidad de miembros de la comunidad
internacional reconocemos nuestra obligación de prestar asistencia humanitaria doquiera
sea necesaria. De ahí, la trascendental importancia del libre acceso a las poblaciones
afectadas en el cumplimiento de esa responsabilidad.
2. LA AYUDA PRESTADA NO ESTÁ
CONDICIONADA POR LA RAZA, EL CREDO O LA NACIONALIDAD DE LOS BENEFICIARIOS NI
NINGUNA OTRA DISTINCIÓN DE ÍNDOLE ADVERSA. EL ORDEN DE PRIORIDAD DE LA
ASISTENCIA SE ESTABLECE
ÚNICAMENTE EN FUNCIÓN DE LAS
NECESIDADES.
Siempre que sea posible, la prestación
de socorro deberá fundamentarse en una estimación minuciosa de las necesidades
de las víctimas de las catástrofes y de la capacidad de hacer frente a esas
necesidades con los medios disponibles localmente. En la totalidad de nuestros
programas reflejaremos las consideraciones pertinentes respecto a la
proporcionalidad. El sufrimiento humano debe aliviarse en donde quiera que
exista; la vida tiene tanto valor en una parte del país, como en cualquier
otra. Por consiguiente, la asistencia que prestemos guardará consonancia con el
sufrimiento que se propone mitigar.
3.LA AYUDA NO SE UTILIZARÁ PARA FAVORECER UNA
DETERMINADA OPINIÓN POLÍTICA O RELIGIOSA
La ayuda humanitaria se
brindará de acuerdo con las necesidades de los individuos, las familias y las
comunidades. Independientemente del derecho de filiación política o religiosa que
asiste a toda organización no gubernamental de carácter humanitario, afirmamos
que la ayuda que prestemos no obliga en modo alguno a los beneficiarios a
suscribir esos puntos de vista.
No supeditaremos la
promesa, la prestación o la distribución de ayuda al hecho de abrazar o aceptar
una determinada doctrina política o religiosa.
4.NOS EMPEÑAREMOS EN NO ACTUAR COMO INSTRUMENTOS DE
POLÍTICA EXTERIOR GUBERNAMENTAL
Las organizaciones no
gubernamentales de carácter humanitario son organizaciones que actúan con
independencia de los gobiernos. Así, formulamos nuestras propias políticas y estrategias
para la ejecución de actividades y no tratamos de poner en práctica la política
de ningún gobierno, que sólo aceptamos en la medida en que coincida con nuestra
propia política independiente.
Ni nosotros ni nuestros
empleados aceptaremos nunca, a sabiendas -o por negligencia- ser utilizados
para recoger información de carácter político, militar o económico que interese
particularmente a los gobiernos o a otros órganos y que pueda servir para fines
distintos de los estrictamente humanitarios ni actuaremos como instrumentos de
la política exterior de gobiernos donantes.
5.RESPETAREMOS
LA CULTURA Y LAS COSTUMBRES LOCALES
Nos empeñaremos en
respetar la cultura, las estructuras y las costumbres de las comunidades y los
países en donde ejecutemos actividades.
6. TRATAREMOS DE FOMENTAR LA CAPACIDAD PARA HACER
FRENTE A
CATÁSTROFES UTILIZANDO LAS APTITUDES Y LOS MEDIOS
DISPONIBLES A NIVEL LOCAL
Incluso en una situación
de desastre, todas las personas y las comunidades poseen aptitudes no obstante
su vulnerabilidad. Siempre que sea posible, trataremos de fortalecer esos
medios y aptitudes empleando a personal local, comprando materiales sobre el
terreno y negociando con empresas nacionales. Siempre que sea posible,
propiciaremos la asociación con organizaciones no gubernamentales locales de
carácter humanitario en la planificación y la ejecución de actividades y,
siempre que proceda, cooperaremos con las estructuras gubernamentales.
6.SE BUSCARÁ LA FORMA DE HACER PARTICIPAR A LOS
BENEFICIARIOS DE PROGRAMAS EN LA ADMINISTRACIÓN DE LA AYUDA DE SOCORRO
Nunca debe imponerse a
los beneficiarios la asistencia motivada por un desastre. El socorro será más
eficaz y la rehabilitación duradera podrá lograrse en mejores condiciones
cuando los destinatarios participen plenamente en la elaboración, la gestión y
la ejecución del programa de asistencia. Nos esforzaremos para obtener la plena
participación de la comunidad en nuestros programas de socorro y de
rehabilitación.
8. LA AYUDA DE SOCORRO TENDRÁ POR FINALIDAD SATISFACER LAS
NECESIDADES BÁSICAS Y, ADEMÁS, TRATAR DE REDUCIR
EN EL FUTURO LA VULNERABILIDAD ANTE LOS DESASTRES
TODAS
LAS OPERACIONES DE SOCORRO INFLUYEN EN EL DESARROLLO
a largo plazo, ya sea en sentido positivo o negativo. Teniendo esto presente,
trataremos de llevar a cabo programas de socorro que reduzcan de modo concreto
la vulnerabilidad de los beneficiarios ante futuros desastres y contribuyan a
crear modos de vida sostenibles. Prestaremos particular atención a los
problemas ambientales en la elaboración y la gestión de programas de socorro.
Nos empeñaremos, asimismo, en reducir a un mínimo las repercusiones
perjudiciales de la asistencia humanitaria, evitando suscitar la dependencia a
largo plazo de los beneficiarios en la ayuda externa.
9. SOMOS RESPONSABLES ANTE AQUELLOS A QUIENES
TRATAMOS DE AYUDAR Y ANTE LAS PERSONAS O LAS INSTITUCIONES DE LAS QUE ACEPTAMOS
RECURSOS
A menudo funcionamos
como vínculo institucional entre quienes desean prestar asistencia y quienes la
necesitan durante los desastres. Por consiguiente, somos responsables ante los unos
y los otros.
En nuestras relaciones
con los donantes y con los beneficiarios hemos de observar siempre una actitud
orientada hacia la apertura y la transparencia. Reconocernos la necesidad de informar
acerca de nuestras actividades, tanto desde el punto de vista financiero como
en lo que se refiere a la eficacia. Reconocemos la obligación de velar por la
adecuada supervisión de la distribución de la asistencia y la realización de evaluaciones
regulares sobre las consecuencias asociadas al socorro.
10. EN NUESTRAS ACTIVIDADES DE INFORMACIÓN,
PUBLICIDAD Y
PROPAGANDA, RECONOCEREMOS A LAS VÍCTIMAS DE
DESASTRES COMO SERES HUMANOS DIGNOS Y NO COMO OBJETOS QUE INSPIRAN COMPASIÓN
Nunca debe perderse el
respeto por las víctimas de los desastres, que deben ser consideradas como asociados
en pie de igualdad. Al informar al público, deberemos presentar una imagen
objetiva de la situación de desastre y poner de relieve las aptitudes y aspiraciones
de las víctimas y no sencillamente su vulnerabilidad y sus temores.
Si bien cooperaremos con
los medios de información para suscitar un mayor respaldo público, en modo
alguno permitiremos que las exigencias internas o externas de publicidad se
antepongan al principio de lograr una máxima afluencia de la asistencia
humanitaria.
Evitaremos competir con
otras organizaciones de socorro para captar la atención de los medios
informativos en situaciones en las que ello pueda ir en detrimento del servicio
prestado a los beneficiarios o perjudique su seguridad y la de nuestro
personal.
MANUAL DE EVALUACION DE DAÑOS Y NECESIDADES EN SALUD PARA SITUACIONES DE DESASTRES
Cuando ocurre un
desastre la evaluación de los daños es una acción fundamental para la toma
adecuada de decisiones, que implica no sólo la valoración de la salud de la
población - de los damnificados y de los afectados - sino también las
condiciones sanitarias que existen como consecuencia del evento en sí y la
evaluación de los establecimientos que ofrecen servicios de salud. Este proceso
permite determinar las necesidades de los sectores más afectados y
específicamente los aspectos cuantitativos y cualitativos de la asistencia
sanitaria.
Este manual, que es
fruto de un largo proceso de trabajo en el que han participado decenas de
expertos del sector salud de los países de la Región Andina, pretende entregar
a los evaluadores y a la comunidad del sector salud en general, un instrumento
técnico que pueda ser utilizado en cualquier situación de desastre, con los
respectivos ajustes según la realidad local y el tipo de evento adverso.
La OPS/OMS ha producido además un manual interactivo de evaluación de
daños y necesidades en salud para situaciones de desastre. Es un instrumento
técnico, dirigido a los trabajadores de la salud para apoyar el desarrollo de
las acciones de evaluación de daños. Puede ser utilizado en cualquier situación
de desastre, pero será necesario realizar los ajustes necesarios que permitan
adaptar su contenido al evento sucedido y a la realidad local específica.
La evaluación de daños y necesidades en el sector salud determina el
tipo y la extensión de los efectos del desastre sobre la salud de las
poblaciones afectadas, los daños y las áreas que requieren ser intervenidas con
mayor urgencia. Implica conocer la salud de las personas, las condiciones
sanitarias que existen como consecuencia del evento, la evaluación de los
establecimientos que ofrecen servicios de salud y las necesidades más
inmediatas para atender a la población afectada.
Puede utilizarse en actividades de evaluación de daños y necesidades en
salud, o bien en acciones de capacitación para formar equipos de evaluadores.
Esperamos obtener comentarios y sugerencias que nos permitan actualizar y
complementar el material aquí existente
EVALUACIÓN DE DAÑOS Y ANÁLISIS DE NECESIDADES (EDAN)
INTRODUCCIÓN PARA APLICACIÓN
La Evaluación de Daños y Análisis de
Necesidades (EDAN) es una herramienta utilizada para conocer el grado de
afectación que la población ha sufrido ocasionado por un evento adverso en un
lugar y tiempo determinado. Como lo dice su nombre; se utiliza para evaluar los
daños y analizar-priorizar necesidades, por medio de la identificación y
registro cuali-cuantitativo de la extensión, gravedad y localización de los
efectos de un evento adverso; así como la identificación de recursos locales y
requeridos, permitiendo así, brindar ayuda humanitaria de forma eficiente y
adecuada al lugar en específico.
La evaluación de daños debe ser organizada
desarrollando un método sistemático que permita proceder rápidamente, con el
fin de establecer una información adecuada para la toma de decisiones, sobre
medidas de asistencia y diseño de técnicas efectivas para la reducción de los
efectos, presentes y futuros, del evento
CRITERIOS PARA DECIDIR SU
APLICACIÓN:
Este instrumento de medición
cuali-cuantitativo de la extensión, gravedad y localización de los efectos de
un evento adverso; se aplica únicamente cuando un porcentaje del 50% ó mayor de
la población ha sido afectado, y cuando ésta no cuenta con los propios medios
para responder a las afectaciones ocasionadas.
Su aplicación es necesaria para saber la
extensión de un desastre y tomar decisiones, por lo tanto es un paso ineludible
de la llamada Respuesta a Contingencias.
Es preferible que se trate de una
“auto-evaluación” por parte de la brigada local de EDAN; cuando ésta no existe,
la evaluación podrá también ser realizada por brigadistas de la microrregión ó
de otras zonas, pero siempre acompañados con personas del lugar a ser evaluado.
CAJA DE TEXTO 1:
Si bien el EDAN debe
aplicarse siempre que existan daños en una parte mayoritaria de una
comunidad para aportarnos información objetiva y exacta, debemos tomar en
cuenta que su aplicación despertará expectativas en las familias afectadas
de la llegada de Ayuda Humanitaria externa.
Como saben, esta
Ayuda Humanitaria externa solo llega cuando las capacidades locales para
afrontar el desastre son rebasadas. Por ejemplo, la Red Civil de Ayuda
Humanitaria asesorada por el PNUD solo se activa cuando tenemos desastres
de un nivel III ó IV (daños en muchos municipios que rebasan la capacidad
de respuesta de su gobierno estatal).
Debemos tomar esto
en cuenta al decidir la aplicación del EDAN, y siempre aclararlo a la población
afectada al momento de la aplicación.
TIPOS DE EVALUACIÓN:
-
EDAN General Preliminar: Se aplica antes de las primeras 8 horas de la
ocurrencia del evento. Es la evaluación que nos dará una primera apreciación
del desastre, teniendo como referencia la información previa del lugar en que
ha ocurrido la emergencia. Se espera obtener en el menor tiempo posible la
información esencial para tomar decisiones de corto plazo sobre la afectación
de la salud, líneas vitales, infraestructura productiva, viviendas y edificios
públicos. Cuando se cuenta con una buena red de brigadas de auto-evaluación,
nodos de procesamiento por municipio/microrregión y un sistema de comunicación
satelital operativo en momentos de desastre, esta EDAN será suficientemente
completa y no es necesario aplicarla en forma complementaria.
-
EDAN General Complementaria: En situaciones en las que las primeras 24 horas no
es posible entrar a algunas comunidades, obtener información de calidad, ó
bien, cuando el evento que produce el desastre se sigue presentando en forma
acumulativa (ej. Inundaciones cuando las lluvias se siguen presentando), se
aplica de nuevo el EDAN una vez pasadas las primeras 72 horas, ó tantas veces
como sea necesario si las condiciones causantes del desastre presentan un
cambio. Esta evaluación vuelve a darnos información, cada vez más completa,
sobre la afectación de la salud, líneas vitales, infraestructura productiva,
viviendas y edificios públicos. También permite detectar puntos críticos para
las fases de rehabilita EDAN Específica: Luego de la EDAN General, es posible
que se requieran evaluaciones específicas para temas en los que los daños son
especialmente graves, ó bien para los que hay interés de algún fondo de
respuesta ó de recuperación. Tal es el caso de evaluaciones en el tema de agua
y saneamiento, salud pública, vivienda, medios de vida/alimentación, etc. En
México, muchas de estas evaluaciones están fuertemente desarrolladas por
dependencias gubernamentales y responden a normas y reglas que en el momento
del desastre debemos retomar. El PNUD ha llevado a cabo sobretodo evaluaciones
específicas en el tema de Agua y Saneamiento (metodología ESFERA), Vivienda
(metodología PNUD-UADY) y Medios de Vida (metodología PMR-PNUD), y cuenta con los
formatos y capacitaciones para aplicarlos .
EJES DE EVALUACIÓN DE UN EDAN GENERAL:
En
la EDAN se evalúan 4 ejes:
-Prioridades Humanitarias:
•
Salud Pública: Mortalidad y Morbilidad: presencia de enfermedades ocasionadas
directamente por el tipo de desastre ocurrido.
•
Acceso a agua de calidad.
•
Acceso a alimentos durante la emergencia.
•
Situación de los albergues y/ó refugios.
-
Infraestructura pública vital:
•
Agua Potable.
•
Drenaje ó equivalentes.
•
Energía eléctrica.
•
Telecomunicaciones y transporte.
-
Infraestructura productiva y Medios de Vida:
•
Sector agropecuario (sector primario)
•
Sector industrial y manufacturero (sector secundario)
•
Sector bancario, turístico y del comercio (sector terciario)
- Vivienda y edificaciones públicas
Todos estos indicadores se deberán expresar
en términos de cantidad y porcentaje. El formato permite que se especifique
sexo y a veces grupos de edad de la población afectada, número de personas y
familias por vivienda, número de personas y familias que requieran alojamiento
temporal, deducidas de aquellas viviendas consideradas no habitables.
Al combinar la afectación a viviendas con la
pérdida parcial ó total en medios de vida, el formato EDAN nos arroja la
cantidad de familias que requieren ayuda humanitaria urgente, que no siempre
coincide con las que están en albergues (ya que muchas familias se trasladan a
casas de parientes ó habitan sus viviendas aunque éstas se encuentren muy
deterioradas). Es importante que en coordinación con
autoridades y comités locales se tomen en cuenta las necesidades y las
propuestas diferenciadas de grupos vulnerables como Niños, Niñas, Mujeres y
Personas Mayores de Edad, así como personas con capacidades diferentes. Para
esto se podrán utilizar los recuadros en blanco donde se propone incluir
observaciones, sugerencias, propuestas.
INFORMACIÓN PREVIA:
Es de gran utilidad, que el formato de
evaluación se encuentre en las comunidades y que estas sean capaces de realizar
su auto-evaluación, en caso de emergencia.
Cuando los evaluadores son externos, deberá
conocerse toda la información posible antes de llegar al lugar, teniendo en
cuenta los siguientes aspectos:
• Población (estructura, distribución
geográfica, desagregada).
• Condiciones climáticas (temperatura,
lluvias).
• Condiciones de Salud (endemias, epidemias,
inmunizaciones, nutrición).
• Antecedentes socio-políticos de la región.
• Idiosincrasia de la población (costumbres,
tradiciones, aspiraciones).
• Recursos disponibles (organizaciones
locales de socorro, seguridad, salud, OSC).
• Infraestructura de servicios (agua,
energía, combustibles, vías de comunicación, telecomunicaciones).
• Historia sobre desastres ocurridos en la
región.
• Nombres, direcciones y teléfonos de
posibles contactos que puedan facilitar la labor de evaluación.
Los cuales permitirán tener una referencia
previa que facilite contabilizar los daños y priorizar necesidades, para la
Respuesta Humanitaria.
ELEMENTOS ÚTILES PARA LA EDAN:
• Mapa del área o región afectada.
• Información Previa.
• Formatos de evaluación.
• Bolígrafos, lápices (negro borrable y de
colores), sacapuntas, borradores.
• Papel, tabla con clip, cinta de enmascarar. • Linterna con baterías. • Deseables: Equipo de comunicaciones, cámara
fotográfica, cinta métrica, grabadora magnetofónica, videograbadora.
LABOR DE PNUD:
1. Emisión de Boletines complementarios a los
de Protección Civil (por ejemplo, dirigidos a población indígena ó a sectores
productivos específicos).
2. Realizar la EDAN de forma directa, por
medio de comités comunitarios de riesgo con brigadas ad hoc y/o por medio de
OSC que tengan presencia en los lugares de la afectación. 3. Sistematizar la información recabada. 4. Realizar y emitir informe detallado a
Subsecretaría de Protección Civil. 5. Monitorear respuesta por parte de
Protección Civil y Organizaciones presentes en el lugar afectado. 6. Activar la Red Civil de Ayuda Humanitaria
y prestar asistencia técnica para su canalización, cuando el desastre sea
catalogado de Nivel III, es decir, cuando rebasa las posibilidades de respuesta
por parte del gobierno del estado y requiere de ayuda nacional, proveniente de
fundaciones, a poblaciones con baja Capacidad de Respuesta, ya sea de forma
directa o por medio de las OSC que tengan presencia en dicho lugar.
RESPUESTA HUMANITARIA.
La respuesta humanitaria por parte de PNUD,
se brinda únicamente cuando la población específica no cuenta con capacidad de
respuesta ante una determinada situación y la Capacidad de Respuesta de su
municipio y estado también han sido rebasados